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 Situado al suroeste de la península ibérica, al sur de la provincia de Huelva, en la confluencia de los ríos Odiel y Tinto, encontramos el Paraje Natural Marisma de Odiel, declarado Reserva Natural de la Biosfera en 1983, con 7185ha de marismas mareales, de las cuales 1100ha han sido transformadas en salinas, y 400ha de bosque mediterráneo.
La vegetación de marisma es predominante en almajo (Salicornia ramossisima) y espartinas(Spartina densiflora), plantas resistentes a la sal, que crean un paisaje llano, casi a la altura del agua. Las aves más representativas son el correlimos común (Calidris alpina), correlimos zarapitín (Calidris ferruginea) y el chorlitejo patinegro(Charadrius alexandrinus), infinidad de especies diferentes visitan cada año el paraje.
En este enclave ornitológico, la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía realiza proyectos de seguimiento para el conocimiento y preservación de la avifauna y su hábitat, entre los más importantes el seguimiento de la población de aves como el aguilucho lagunero y la espátula, de reintroducción de águila pescadora como especie nidificante, y seguimiento en invernada del águila pescadora, u otras aves en migración, principalmente limícolas y estérnidos.
Hay dos herramientas fundamentales para el estudio de las aves, el marcaje científico y el censo, con ellas se estudia la conducta de los habitantes del aire, modo de ocupación del territorio, necesidades y carencias, rutas migratorias, evolución de la migración.
Para realizar el marcaje científico es inevitable la captura, el ave debe estar el mínimo tiempo posible en contacto con el hombre y suponerle el mínimo stress. Una vez recogidos datos como sexo, destino y procedencia, edad aproximada, condición física; estas aves se anillan. Las anillas están regladas internacionalmente, con un código exclusivo para cada ave, y el país de procedencia, los datos son introducidos en el registro nacional, que permite contrastar datos en caso de darse recuperaciones en otros lugares del mundo. Hay diferentes anillas para cada especie, adaptadas a las medidas de pata, metálicas, que no suponen ningún perjuicio para el ave. En el 97 comenzó el seguimiento y marcaje de la población invernante de águila pescadora, objetivos del estudio eran conocer la procedencia y destino de los ejemplares, número de adultos y jóvenes, machos y hembras, modo de ocupación del territorio, etc. Se diseñó un método de captura inocuo específico para el ave, se les colocó la anilla metálica y otra de plástico en color con dígitos alfanuméricos para su identificación a distancia, y a partir de censos en puntos estratégicos de la marisma y a diferentes horas del día, se supo la existencia de 10 ejemplares, más del triple de lo estimado, y el factor determinante para tal escasez: la falta de posaderos naturales. 
La colocación de postes de madera a modo de posaderos aumentó rápidamente la población invernante. Hasta hoy se han controlado 80 ejemplares.
Se ha podido determinar que un 75% son machos frente a un 25% de hembras, que utilizan una misma zona y posadero año tras año. No aparecen ya nuevos adultos, tan sólo jóvenes, lo que nos indica que el primer año de vida se instalan en el territorio al que van a volver durante toda su vida.
También se sabe que los adultos no comparten posadero, mientras que los jóvenes sí. Sin embargo, en la pesca no son territoriales, pueden verse hasta 5 ó 6 pescando en la misma zona.
A partir de la identificación de estas aves a distancia, sabemos que proceden de países del norte de Europa (Finlandia, Noruega, Suecia, Escocia, Alemania), Cerdeña y las Baleares). En el mismo año, 1997, se comenzó el seguimiento y marcaje de aves limícolas y estérnidos en el paso postnupcial, comprendido de Julio a Octubre, el objetivo de este proyecto es dar a conocer el número de ejemplares de las especies, cual es el porcentaje de adultos y jóvenes, de esta forma estimar los resultados de la época de reproducción en Europa, procedencia, lugar de invernada, si utilizan las mismas rutas, cuáles migran primero, jóvenes, adultos, machos, hembras, la longevidad,...  La metodología es totalmente sistemática, se colocan el mismo número de redes, en los mismos lugares, en fechas y condiciones naturales de luz similares, para que los datos nos permitan evaluar la evolución de la migración.
Los limícolas son aves de pequeño tamaño que se alimentan de limos, tanto en zona de humedales costeros como en los humedales interiores, por tanto la desecación es nefasta para estas especies. Marismas del Odiel es una marisma mareal, lo que implica que todo el año hay agua, y es un lugar ideal para el descanso y alimentación de las aves en migración. Cada especie por tener diferentes características, por ejemplo de pico, o pata, utilizan un nicho diferente; por ejemplo, la avoceta al tener un pico curvado barre la superficie del fango, mientras que otros de pico corto tomarán el alimento a más o menos profundidad.
El Odiel es lugar de alimentación y reposo, donde acumulan grasa en abdomen y pecho, el “combustible” necesario para viajar al continente africano. Se determina la condición física en la que llegan y cuánto tiempo necesitan para emprender ruta al sur. Las aves que visitan cada año nuestro parque son un bioindicador de la calidad del hábitat.
 Hasta el momento no se había hecho un trabajo tan exhaustivo con estas especies, ya se conocen sus movimientos migratorios, con más de 20000 aves marcadas, más de un 5% de ejemplares recuperados (frente a un 0’2 de paseriformes). Se ha podido comprobar que utilizan las mismas rutas todos los años, hacia el sur por el estrecho de Gibraltar y en el retorno por el Bósforo o de nuevo por Gibraltar. Hay rutas regulares de algunas especies como el charrán ártico, del que no había ninguna captura en la península, o del petrel de Bulwer, del que ni siquiera se había dado antes ningún avistamiento.
Existe una red de voluntarios imprescindible para el desarrollo de las actividades y como medio de concienciación ambiental. Marismas del Odiel es, además de un observatorio privilegiado para el estudio de estas aves, un enclave estratégico en la migración, es decir, un punto imprescindible para la propia existencia de estas aves migratorias.
 José Manuel Sayago Robles:
alma del proyecto. Por iniciativa propia Sayago propuso y está llevando a cabo los proyectos con aves como el aguilucho lagunero,el águila pescadora u otras aves en migración. Ha propuesto métodos innovadores, entre otros el primer método de captura inocuo del águila pescadora. |
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